Cynara, la historia de éxito de un lince hembra
La Fundación Parques Reunidos colabora con la Fundación Save the Rhino International dando apoyo al programa de campo de la reserva Mkhuze Game para proteger al rinoceronte blanco y negro.
Mkhuze Game es una de las reservas más antiguas de África en la que queda patente la absoluta dedicación de la comunidad hacia la conservación del rinoceronte blanco y negro, así como otras especies salvajes, incluyendo guepardos, leopardos y elefantes.
Los rinocerontes están gravemente amenazados debido a la caza furtiva por su proximidad con la frontera de Mozambique y la sequía actual. Algunos de los rinocerontes blancos se han tenido que trasladar, incluso, a la vecina iSimangaliso.
Los equipos de vigilancia formados por rangers o guardabosques luchan para reducir la caza furtiva poniendo en peligro su vida. Con la creciente participación de las organizaciones criminales sin escrúpulos, los cazadores furtivos de hoy en día están armados y son peligroso. Cada día, estos valientes guardabosques recorren África y Asia arriesgando sus vidas por la supervivencia de de estas especies. Al apoyar a esta reserva con una donación anual de 1.500 euros, la Fundación Parques Reunidos podrá ayudara los guardabosques a comprar equipos vitales como 10 tiendas de campaña para dos hombres y 22 días de ‘paquetes’ de hidratación que reemplazarán las viejas mochilas, entre otras muchas cosas. Con esta contribución, los rinocerontes podrán seguir viviendo en estado salvaje durante muchas generaciones más.
Sudáfrica contra la caza furtiva
Sudáfrica está siendo golpeada duramente por la caza furtiva. El año pasado, un rinoceronte fue matado cada ocho horas. Y es que esta especie vivió en 2015 el peor año de su historia reciente. Los datos oficiales del gobierno de Sudáfrica indican que los cazadores ilegales causaron la muerte el año pasado de 1.175 rinocerontes en este país, una cifra ligeramente inferior a los 1.215 animales muertos en 2014, pero en el conjunto del continente los rinocerontes muertos por los furtivos volvió a marcar un récord histórico, según los datos provisionales facilitados por Traffic, un proyecto internacional de lucha contra el tráfico de especies creado por iniciativa de las organizaciones WWF, IUCN y CITES.
