¿Pan con leche para las aves? ¡No!

Nos alegra presentaros #12mesesvolando, una iniciativa con la que cada mes, Brinzal ofrecerá en nuestro blog un consejo útil para cuidar de nuestras rapaces nocturnas. Hoy, a través de Fundación Parques Reunidos, comenzamos esta bonita colaboración apoyando la recuperación y conservación de estas bellas aves. Así comienza #12mesesvolando:

¿PAN CON LECHE PARA LAS AVES? ¡NO!

Estamos en plena temporada de reproducción. Las pequeñas aves, y también las de mayor tamaño, se afanan en sacar adelante a sus crías. Es el momento de prepararse en Brinzal: cada día llegarán decenas de pequeños que caen de los nidos, o revolotean torpemente y son recogidos.

El cuidado de estos pollos es más complicado cuanto menor es su tamaño. Las aves de pequeño tamaño –gorriones, carboneros, verderones, etc.- son difíciles de sacar adelante en casa. Y si se consigue mantenerlas con vida, su comportamiento quedará tarado para siempre.

No solemos recomendar a nadie que lo intente. Muy al contrario, pensamos que el mejor sitio donde puede acabar un pollo de un ave silvestre es un centro de recuperación como Brinzal.

Si además observáis unas normas básicas, tendréis muchas más posibilidades de conseguir que el pequeño que habéis encontrado vuelva a ser libre:

  1. Asegúrate de que realmente necesita nuestra ayuda. A veces, guiados por nuestra buena voluntad, separamos de sus padres a los pollitos que están dando sus primeros vuelos.
  2. No le des de beber aunque haga calor. ¡¡Es muy fácil que se asfixie!!
  3. No le des de comer. En casa, no tenemos los alimentos adecuados y a veces, ni siquiera les viene bien comer inicialmente. Recuerda: la leche es para los mamíferos.
  4. Introdúcelo en una caja de cartón, evitando así que pueda vernos; estará mucho más tranquilo.
  5. Entrégalo cuanto antes en un centro de recuperación.

Información elaborada por Brinzal.

Imagen: Javier Alonso.